No sé si es casualidad o no, pero los lunes lluviosos, mismamente como el de hoy, mis ganas de meterme en el sofá, taparme con una mantita y ver alguna peli o serie crecen exponencialmente. Los peregrinos debemos afrontar largas jornadas a la intemperie sufriendo un tiempo desapacible, sí, pero lo cierto es que también tenemos derecho a procrastinar de vez en cuando 😝. Si os digo que hoy vengo a hablaros de una serie mítica ambientada en los últimos años de la década de los 90, en un ajetreado pueblecito que cuenta con doce cementerios, con una Boca del Infierno y que se llama Sunnydale es probable que ya sepáis que me refiero a Buffy, cazavampiros.
Actualmente me hallo en pleno revisionado de esta serie. Mi plan diario es el siguiente: llegar del trabajo a eso de las 3:30, ponerme un capítulo mientras como (o preparo la comida) y disfrutar. Buffy fue una serie que en su momento desdeñé por prejuicios absurdos, descubrí sobre el 2005 y que ahora vuelvo a ver porque, entre otras cosas, es magnífica para aprender a desarrollar algunos trucos del oficio de cuentacuentos. No en vano, Buffy es considerada como una de las series más influyentes de la historia de la televisión.
Sus señas de identidad son algunos episodios magistrales, curiosamente los centrados en el personaje de Xander suelen serlo, un desarrollo de los personajes de quitarse el sombrero (nada de lo que sucede en las temporadas finales con ellos es casual y todo se anticipa) y una historia compleja, más allá del tono ligero y humorístico con la que es tratada. Y hoy, en el #diainternacionaldelamujer , nada mejor que reivindicar esta serie que versaba, por encima de otros muchos temas, sobre la fortaleza de sus personajes femeninos, la igualdad y la inclusión
¿Vosotros habéis visto Buffy o alguna de las muchas series influenciadas por ella?
